nos gusta el barrio. lo pensamos todxs cada día, cuando llegamos al adriantic (unxs en metro, otrxs en moto). las calles anchas y casi desiertas, esa calma, los bloques-continentes, la bodega de moncho, el tren al fondo, y más allá el río, y a lo lejos les tres xemeneies. y, aunque hace frío, el sol nos acompaña (cruzo los dedos) cada día.
por la mañana trabajamos con oriol y alex. primero machacamos texto, nos funcionan bien estos ratos en grupo o por parejas de repetir, repetir, sin buscar más que fijar, imprimir el texto en la lengua, en el cuerpo, en el cerebro. hoy lo hacíamos acompañados de una pelota vieja de fútbol que alguien trajo. de este tirar texto, y volver obsesivamente a lo que falla, también nacen preguntas, también se entienden cosas, cosas de lo inmediato.
y, ya sí, con sus palabras, invocamos a ISI y a MAXI. acercarles (que se acerquen) es inevitable.
la amistad es un imán muy poderoso. y el abrazo se acontece como su lenguaje natural.
pasamos toda la mañana ingadando en la escena. iván propone incansable. ¿quizá por qui?, ¿quizá por allí?, seguramente lo uno más lo otro, más lo otro, más lo otro. lo discutimos. y otra vez. se trata de no mecanizar, encontrar el estímulo y su justa respuesta, ser espejo, y lienzo en blanco. alex y oriol bucean, saborean, reconocen, imaginan, descubren, dudan, prueban, navegan.
después, iván y oriol se van a buscar bocadillos (moncho style, barra entera por cabeza) mientras alex y yo repasamos su monólgo.
por la tarde se quedan trabajando iván, alex y oriol, y se unen topo, marcel y helio. mañana nos contarán, o eso comentamos en el coche la otra parte de la compañía (xavi, anna y yo) que nos perdemos el ensayo porque nos vamos de bolo a cardedeu con sé de un lugar.
hemos pasado el ecuador de este intensivo navideño. vamonos! (a camprodón shore)
UN SECRETO
a veces ISI duerme en la casa azul de la calle hospital.
i... bonanit